Browse » Home
martes, 12 de febrero de 2013
Networking: claves para armar un buen contacto Aplicar correctamente el networking en tu empresa te traerá beneficios sobre todo cualitativos y, a la larga, podrás contar con una mejor reputación
¿A qué te dedicas? ¿Quién es tu nicho? ¿Cuál es tu alcance? ¿Qué vendes? Ante las preguntas que te hacen todos los días, seguro has obtenido la capacidad de perfeccionar tus respuestas, ya que todo el tiempo estás conociendo personas y estrechando nuevas manos, contestas nuevos correos y tu agenda se va llenando de más nombres. Pero, ¿has sabido sacarle provecho a algo tan rutinario? ¿Has aplicado correctamente las básicas del networking?
Ante algo tan natural como tu propia rutina, hoy, el networking se posiciona como una herramienta eficaz para optimizar recursos, disminuir costos y, sobre todo, para explotar tu propia agenda y obtener un beneficio colectivo, es decir, mientras tú busques un beneficio para tu marca, debes considerar que estarás ofreciendo también un beneficio para alguien más.
Se trata de construir alianzas estratégicas para crear algo más poderoso: una red de colaboradores que intercambian y complementan información, tips, recursos, tiempo, experiencia, difusión y hasta reputación. Por eso a veces no es tan sencillo explotar este recurso, ya que no se tiene claro cómo aplicarlo en términos reales y cómo sacarle el mayor beneficio para los agentes involucrados.
Por eso te presentamos los puntos clave para armar un buen contacto que te permita aplicar el networking en tu empresa y obtener el mayor beneficio para tus redes, según recomendaciones de César Herrera, catedrático de la Universidad Panamericana (UP).
Define un objetivo
No se trata de buscar alianzas con todo aquel que te ofrezca una tarjeta de presentación y te diga que tiene algo que podría interesarte. Sin caer en el error de creer que muy pocos pueden ofrecerte algo útil, es importante que determines qué quieres con una alianza estratégica de networking y quiénes realmente podrían representar un beneficio para ti.
Y este punto es recíproco, pues tal vez el contacto que buscas no está interesado en colaborar contigo o no has tenido oportunidad de explicarle el beneficio que podrían tener de construir un proyecto juntos.
Explota tu imagen pública
La imagen pública que proyectas es vital desde la primera impresión, aunque esto seguro lo sabes. De lo que se trata es de la confianza y la seguridad que proyecta tu cuerpo, pues tú sabes lo que denota un flojo apretón de manos. Sé y muéstrate seguro, confiable y amable.
Hay que ser y parecer. Aunque las apariencias engañan, a la larga tu trabajo terminará hablando por ti y respaldará la imagen que proyectaste desde un principio. Tus y contactos y tú siempre agradecerán que la primera impresión no haya sido sólo para la fotografía. Viste y actúa cómodo, pues mientras más natural y fresca sea la imagen que proyectes, obtendrás más credibilidad.
Escucha, luego habla
Si le dejas ver a tu potencial cliente-socio que estás más interesado en escucharlo que en convencerlo, éste se sentirá agradecido por el tiempo de exposición. Ya sea en una reunión casual o en una ex profeso para crear contactos, mantente siempre abierto a escuchar y cuando sea tu oportunidad de hablar, no caigas el típico error de derramar las cualidades de tu marca.
Al contrario, usa los primeros 10 ó 15 segundos para decir qué haces y para soltar una pregunta que provoque el diálogo o el intercambio con quienes hasta el momento te hayan resultado interesantes. Hablar de ti y de lo que haces vendrá en la misma dirección, pues seguro alguien te preguntará más sobre tu marca. Y ahora sí –recomienda el experto– expresa puntual lo que te hayan consultado.
Contáctalos
“Seguimos en contacto”, “Yo te busco”, “Hay que vernos, ¿no?”. Seguro estas frases te son familiares y, quizá en muchos de los casos, sólo se han quedado en eso, en frases. Evítalas y cuando las expreses acompáñalas de una invitación a comer o de una cita concertada en algún lugar.
Se trata de un ejercicio paralelo al endomarketing, pues mientras mantengas una relación activa y fresca con tus clientes-socios, tu propia red lo será y los beneficios de construir una comunicación cordial con tus contactos serán la consecuencia natural de procurarlos.
En este sentido, el experto asegura que tomar la iniciativa siempre implica una mayor ventaja y una mayor responsabilidad, ya que no se trata de ser el primero en todo, sino de crear propuesta y explicar cómo concretarla. Ahí radica el éxito, afirma.