Revisa, pregúntate, ¿Cuántos de los propósitos que fijaste el 1 de enero de 2015 has materializado a día de hoy? ¿Cuántos fueron perseguidos hasta final de año? ¿En cuántos abandonaste?
Voy a compartir contigo una técnica más potente y efectiva que establecer propósitos maravillosos de un año para otro. Algo más simple.
Hechos mejor que propósitos
En lugar de crear una lista de propósitos para este año y compartirla en tus redes sociales alardeando de buenas intenciones ante todos tus amigos y contactos, te propongo la alternativa. Empieza hoy a trabajar en las cosas que más te preocupan, la educación de tus hijos, lanzar tu nueva empresa, crear el plan de negocio de tu marca personal, aprender un nuevo oficio, o cualquier otra cosa. Entonces ve tachando todas las cosas importantes que consigas desde hoy hasta el 31 de diciembre de 2016. Al mismo tiempo, anota todas esas pequeñas victorias que vas declarando y crea un archivo de estas tareas completadas, esos logros que vas sumando. Unos días más tarde, cuando entres en 2017, rescata esa lista, revísala, recréate con todo lo que has hecho. Y sí, si te apetece comparte con el mundo todo lo que has conseguido.Una gran manera de poner a competir deseado versus alcanzado. Dicho versus hecho. Intención versus resultado.
No necesitarás hablar, esa lista hablará, bien alto y de manera contundente, por ti.
Bellísimo.
¿Te atreves?
Isra garcia