Soylent, un proyecto emprendedor con crowdfunding El emprendedor norteamericano, Rob Rinehart, creó un producto contra el hambre y el sobrepeso, con el que una persona ahorra hasta 90% de su gasto del súper. La empresa ofrece muestras gratis a los consumidores potenciales.

Rob Rhinehart es un emprendedor estadounidense con mucha imaginación y una idea de negocio que puede contribuir a eliminar el hambre mundial. Su fórmula se llama ‘Soylent’, una bebida que le ha permitido subsistir durante más de dos meses sin necesidad de comer y cuyo costo es muy económico en comparación con los alimentos disponibles en supermercados y restaurantes. “Soylent sabe muy bien, tiene un gusto más dulce que nada, no me ha cansado del sabor”, afirma Rhinehart. “Necesitamos vitaminas y minerales. Necesitamos carbohidratos, no pan; aminoácidos, no leche. Está bien comer estos alimentos cuando a uno se le antoja, pero no todos tienen la capacidad adquisitiva para comprarlos o el deseo de hacerlo”, comentó Rhinehart, creador de Soylent, en una entrevista para la publicación británica Vice. ¿De qué está hecha Soylent y cuánto cuesta? La preparación de este sustituto alimentario consiste en una mezcla de carbohidratos, sodio, zinc y otros elementos básicos que contienen los alimentos convencionales que compramos en el supermercado. La receta completa y detallada para preparar Soylent puede encontrarse en el sitio web de Rhinehart. Según su creador, el costo de los ingredientes para preparar suficiente Soylent como para sustituir el 100% de los alimentos durante un mes, a razón de una dieta de dos mil 900 calorías, asciende a unos 50 dólares, es decir, 600 pesos aproximadamente. Aunque en función de la cantidad de calorías y de cantidad de proteínas que incluya la bebida el costo puede subir hasta 150 dólares, unos mil 800 pesos. El norteamericano promedio gasta en promedio, 604 dólares, unos siete mil 200 pesos mensuales en el supermercado, por lo que su ahorro mensual para Rhinehart desde que sustituyó a los alimentos por la bebida, supera los seis mil 500 pesos por mes. ¿Peligro para la salud? Soylent no ha sido aprobada por ninguna agencia alimentaria en Estados Unidos, México u otro país, carece de la aprobación de nutriólogos y médicos y no cuenta con certificados que garanticen que sea saludable. Sin embargo, el propio Rhinehart lleva más de 60 días consumiendo la bebida. Además, el emprendedor asegura que varios voluntarios en el área de San Francisco, California, e incluso en otras partes del mundo consumen Soylent. Lo que lo ha llevado a publicitar su producto en una página web de crowfunding o de “financiación colectiva”, en donde miles de potenciales inversionistas pueden aportar una pequeña cantidad de dinero para impulsar el proyecto. El emprendedor ofrece enviar una muestra gratuita de su bebida a los voluntarios que decidan sustituir una parte o el 100% de su alimentación por Soylent. A cambio, Rhinehart solicita la realización de chequeos médicos periódicos una vez por semana, para incluirlos en su investigación. En la página web de Rhinehart se presentan algunos testimonios de consumidores de Soylent, incluido el de su creador, quien asegura que tras dos meses de consumir la bebida y de someterse a revisiones médicas su estado físico y anímico es excelente. “No tener que preocuparte por la comida es fantástico. No hay que ir al súper ni lavar los platos ni decidir qué preparar de comer ni preocuparse por comprar alimentos libres de gluten o vegetarianos. Los recibos de electricidad y de agua son más baratos. Ahorro varias horas al día y cientos de dólares al mes. Me siento liberado. Creo que Soylent puede ser también una alternativa para las personas que quieren bajar de peso, porque es muy fácil subir o bajar sólo cambiando la proporción de los ingredientes de la bebida”, asegura el emprendedor. ¿Una dieta para perder peso? Según su creador, la cantidad de calorías que contiene Soylent puede variar en función del consumidor. Él ha adoptado una mezcla que le proporciona más de dos mil 600 calorías, una cantidad similar a la que recomendada la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos o Food and Drug Adminsitration (FDA por sus siglas en inglés) para un varón adulto, pero asegura que la bebida puede adaptarse para contener menos calorías e igualar las recomendaciones de la FDA para una dieta femenina. Si bien, es necesario enfatizar en que la FDA no ha otorgado ningún tipo de certificación de salubridad a Soylent. Así, sea como sustituto alimenticio, como una pócima para bajar de peso o como una alternativa para combatir el hambre en el mundo, este emprendedor estadounidense tiene por delante una tarea monumental. Si consigue, por un lado, que la FDA recomiende el consumo de Soylent y, por otro, que asociaciones de nutriólogos y médicos de prestigio respalden su receta, quizá veremos su bebida junto al agua embotellada, los refrescos y otras bebidas que hoy se exhiben en las estanterías de tiendas de conveniencia y supermercados. A pesar de todo, como buen emprendedor, Rhinehart, se mantiene fiel a su idea y está aprovechando el crowdfunding para llevar adelante su negocio.