Una “gran mañana” no solo establece el tono de un gran día, si no que además te llena de energía y te hace sentir feliz y con suerte, pleno. En cambio una mala mañana puede hacerte querer abandonar y no salir de la cama. ¿Cómo entonces tener más grandes que desastrosas mañanas?
Antes de empezar debo decir, que no hay una plantilla para todo el mundo, no hay una solución maestra, cada mañana para cada persona es diferente. En mi caso, he ido construyendo mi “gran mañana” poco a poco con el paso del tiempo.
Para diseñar tu gran mañana, aquí hay 10 “hacks” que seguro te ayudarán:
1. ¿Por qué lo haces?
Cierto, entiendes que una gran mañana te beneficia, pero eso solo no te motivará a hacer nada más.
Entiende porque haces algo. Anota en tu agenda o Evernote las cosas que desearías lograr cada mañana y lista todas las razones que te llevarían a ello. Si en algún momento te encuentras descarrilado, saca tu lista y revisa tus aspiraciones. Fijarte en tu lista puede ayudar a entender tus prioridades, y te sentirás peor si sales del camino que si no tuvieras esa lista.
2. Empieza anoche
Para mí, las mejores rutinas de las “grandes mañanas” empiezan la noche de antes.
Prepara la ropa que usarás, la playlist con la cual empezarás el día, tu rutina de entrenamiento, especifica todos tus compromisos y responsabilidades profesionales y personales, planifica tus cenas. Asegúrate que todo esta listo para empezar una gran mañana, de esta manera, cuando llegue la mañana, no tendrás que pensar que necesitas. Tu día puede tener un gran comienzo su has planificado ese punto de partida.
Nota: esto es perfectamente complementario con “no existir un mapa”, planifica cómo, luego lo que ocurra durante el día ya es otra cosa.
3. Madruga
Debo admitir que este es el punto que más me cuesta de adoptar, ya que es por la noche cuando alcanzo mi punto de productividad y creatividad máxima. Sin embargo, cuando madrugo, mi “gran mañana” es todavía más “gran mañana”.
Las mañanas son frecuentemente eléctricas porque siempre llegas justo. Levantarte 30 minutos antes de lo previsto eliminará el sentimiento de ir siempre a contrarreloj.
La mañana es uno de los mejor lugares donde encontrar tiempo extra. Utilizar esos 30 minutos extra que arriba mencionaba significa que puedes meditar, leer o hacer deporte.
4. Estado físico
Si no eres una persona de mañana, como yo lo era hasta hace dos años, una rutina para alcanzar la “grana mañana” puede ser dura, lo sé. Para lograr la transición hacia el modo productivo hay que cambiar tu estado.
Una ducha de agua fría alteraría ese estado inmediatamente. Hacer deporte justo recién levantado también ayuda. Practicar sexo definitivamente es una de mis mejores elecciones y recomendaciones. Meditar y realizar una sesión de estiramientos podría ser una buena fórmula también.
5. Cronometra tu rutina
Descubre cuanto tardan las cosas cronometrando la rutina responsable de tu “gran mañana”.
Aquí podrías pensar que puedes darte una ducha, cepillarte los dientes, vestirte y desayunar en cinco minutos. No puedes. Usa un contador para monitorizar cuando tiempo demanda cada paso de tu rutina matinal para hacer un “gran mañana”, luego determina que tiempo necesitas para llevarla a cabo basándote en los resultados que has ido obteniendo. Nuestros cerebros son bastante malos al estimar el tiempo transcurrido.
6. Huye de las distracciones
El mayor problema llega al realizar una “gran mañana” llega cuando aparecen las distracciones.
Creer que aprovechar tu mañana para comprobar el email, social media, las noticias o hacer llamadas es productividad parte de una gran mañana” es un fuerte error. Lo que estás haciendo es distraerte de lo que necesita ser hecho primero. No te permitas hacer ninguna de esas tareas hasta que no hayas finalizado la rutina matinal hacia “tu gran mañana”.
7. Elimina elecciones
Esto es algo que descubrí hace más de medio año. Viste siempre las misma ropa, mismo color, como siempre lo mismo, diseña el mismo set de actividades ridículas. Usa plantillas para responder emails.
¿Aburrido? No lo sé, para mí no. Sin embargo, el objetivo aquí es minimizar la toma de decisión de cosas que tienen un impacto insignificante sobre nuestras vidas y pasar a través de la rutina matinal de una “gran mañana” con el mínimo output mental posible. Cuantas menos decisiones tengas que tomar recién levantado, menos fatigado estará tu cortex prefrontal, liberándote así para concentrarte en aquellas ideas, decisiones y acciones que importan. Eliminar elecciones es un gran hack de ultraproductividad.
8. Fija las prioridades para el día
Creo mi agenda diaria el día anterior en la noche, pero utilizo la mañana siguiente para identificar que es lo más importante que tengo que hacer. Conocer las cuatro cosas más importantes que necesito completar en un día me proporciona momentum y me ayuda a cumplir con el objetivo.
9. Todo recompensas
Particularmente es una de las mejores prácticas para la “gran mañana”, empieza la mañana dándote el máximo número de recompensas sanas que puedas. Escuchar tu música favorita, desayunar tu comida favorita, practicar tu deporte favorito, sexo con tu persona favorita (si es el caso). Lo que más te guste y te siente bien, ofrécetelo en la mañana.
10. Commutar
Sé que esto es una preocupación para muchas personas. Mi sugerencia para una “gran mañana” es, nunca conduzcas.
Tomar el autobús, tren, metro, tranvía o taxi te dará tiempo extra para lo que quieras, andar serviría igualmente y además es más saludable. Si vas en bicicleta podrías utilizar podcasts que te interesen o responder llamadas de trabajo.
Con esto podrías estar más que equipado para construir tu “gran mañana”. A por ello. Isra Garcia