Entre sus cambios más relevantes se encuentra el cierre del servicio Latitude, el cual no despegó como la compañía deseaba y ahora será trasladado a Google+.
De inicio, el gigante de Internet anunció la llegada del nuevo Maps para smartphones y tablets con sistema operativo Android –posteriormente para iPhone y iPad de iOS–, y destacó el diseño que permitirá tener una navegación más fácil y rápida.
Añadió que tendrá mapas más completos y hechos a la medida de cada usuario, por ejemplo, creará un mapa personalizado cada vez que el usuario realiza una búsqueda o hace clic, mostrándole elementos relevantes para él.
Además, todo el mapa es interactivo: al hacer clic en cualquier punto, éste se centrará en la ubicación específica y mostrará diversos datos útiles como sitios relacionados y mejores rutas para llegar al punto o dirección de búsqueda.
También, al realizar búsquedas, se podrán destacar los sitios que sean del agrado del usuario y escribir reseñas, adaptándose a sus preferencias y pueden sugerirle ideas como restaurantes, o bien permitiéndole calificar un sitio.
En este sentido, Google presentó la integración de Zagat, el sistema de calificación de 5 estrellas para obtener una rápida recomendación basada en la evaluación que amigos y otras personas dan a lugares como restaurantes, bares y cafeterías.
¿En qué cambió Google Maps?
Si bien los cambios de diseño y algunas funciones básicas se destacan en esta actualización, lo cierto es que la nueva versión presenta modificaciones importantes, como la desaparición de Latitude y la disponibilidad de mapas sin conexión (offline).Respecto al primer punto, Google informó que Latitude y check-ins –herramientas de geolocalización– ya no forman parte de la nueva aplicación y serán retirados de versiones anteriores el 9 de agosto.
Sin embargo, señaló que estas funciones se trasladarán a su red social Google+, con lo que sus usuarios podrán seguir viendo a sus amigos y familiares en el mapa.
Sobre la función de mapas sin conexión, señaló que no está disponible y en su lugar ha creado una nueva forma de acceder a ellos: basta con introducir “OK Maps” en la caja de búsqueda mientras se visualiza el área que se quiere guardar.
¿Por qué “borró” del mapa a Latitude?
Las razones precisas sólo las conoce la propia compañía, sin embargo los analistas del sector señalas que éstas podrían ser por cuestiones estratégicas o por el nuevo debate sobre privacidad a raíz de la exposición del sistema de espionaje del gobierno estadounidense; o incluso una mezcla de ambos.El cierre del servicio de localización social, que fue lanzado en 2009, no supone una gran pérdida para la marca, ya que su uso era marginal y la idea nunca despegó como Google esperaba.
Sin embargo, le dará una segunda oportunidad, pues varias de sus funciones se implantarán en otras herramientas de la compañía, por ejemplo, Google adoptará los check-ins y permitirá compartir localizaciones con los círculos, pero otros datos y opciones se perderán para siempre.
En este sentido, el historial de visitas y localizaciones sólo estará disponible, en principio, en el sistema operativo de Google, y para activarlo se debe acudir a “Ajustes de Google” y seleccionar la opción “Historial de ubicaciones”, pero ésta no comparte la información con nadie, por lo que se pierde la función social si no se quiere utilizar la red social de esta compañía.
Por otro lado, el cierre de dicho servicio afectará a terceros, ya que desaparecerá su API, teniendo un impacto en los desarrolladores que hayan utilizado esta herramienta, pues ahora deberán hallar una alternativa para seguir con su trabajo. Al menos podrán almacenar toda la información a la que ya hayan accedido.
En cuanto a la privacidad, Latitude permitía saber en todo momento dónde se encontraban sus usuarios y cuál había sido su itinerario, información que en teoría sólo se compartía con los contactos deseados de cada personas, pero que a raíz de las revelaciones de Snowden ha causado que todos los servicios de las grandes compañías de Internet sean vistos de otra manera.
Y si bien se destaca que esto no es en realidad el principal motivo para cerrar este servicio de localización –de lo contrario no se hubiera trasladado a Google+–, lo cierto es que abre un nuevo debate sobre la privacidad y la permanente vigilancia, privada o del gobierno, poniendo a la mira a servicios como Latitude.