Si te preguntas cómo un pequeño negocio como el tuyo podría sobrepasar a una competencia consolidada, con grandes presupuestos, ubicada estratégicamente y con más recursos y quizás clientela que tú. Bueno esto de aquí abajo será una manera muy digna de empezar a hacerlo:
1. Encanta a tus clientes, a los que entran por la puerta y a los que llevan comprando desde que abriste la persiana. Olvida a quien no puedes llegar o todavía no conoces.
2. Entrégales el doble de valor con respecto a lo que gastan. Dos maneras:
A. Si compran un vaquero, que se lleven un cinturón o un pañuelo con ello.
B. Servicios periféricos: servicio de sastrería + envío a domicilio.
3. Compite por excelencia e individualidad con tus clientes, no por precio. Sube los precios, trabaja productos con una historia que resuene en unas pocas personas, si no tienen historia, créala, que sea creíble, autentica y emocional (humana). La calidad de tu producto debe ser brillante, no solo debe justificar el precio, sino ser percibida como más alta del precio que pagan.
4. Trata a cada cliente como alguien único (lógico, pero nadie lo hace), incluso alguien nuevo que entra por la puerta. Reten sus nombres en tu memoria (o en un Excel). Sigue conversaciones en la web social y haz que deriven en tu punto de venta para conocer a esas personas.
5. Recompensa en lugar de captar. Agradece con un gesto poco convencional cada compra de un cliente. Adicional al punto 2.
- Lookalike audiences.
- Custom audiences.
- Ofertas.
- Dark posts.
Cada gran amenaza por inminente que sea o el hecho de enfrentarte a una competencia feroz, para pequeños negocios, no supone más que una oportunidad sublime de marcar la diferencia, siempre que lleves el “Go” a todas partes.
Tienes el “Go”, sobrepasa. Isra Garcia