La compra de TNT, una mala noticia.
La tertulia de los logísticos.
La
compra de TNT por Fedex se está vendiendo por parte de los compradores
como algo que reforzará la oferta de paquetería en Europa. Eso no es
verdad. Parece que nadie va a alzar la voz entre los cargadores mal
representados y menos organizados, pero como logístico hay que señalar
que la desaparición de TNT en el seno de Fedex restringirá más la
competencia y habrá menos oferta en el transporte interno de la UE.
Por
mucho que desde Fedex se insista que la solución de la compra por parte
de UPS sí que era la mala y curiosamente un competidor americano le dé
la razón a la Comisión Europea tratando de defender su posterior oferta,
la realidad es que la paquetería dentro de la UE está aquejada de los
mismos males que pueden pasarle a la telefonía o al roaming de datos. La UE no está funcionando en este sentido como la unión de Estados europeos,
como sí pasa en Estados Unidos. Mandar un paquete a no más de 400km
Entre Barcelona y Lyon por paquetería internacional cuesta mucho más que
mandarlo entre Nueva York y San Francisco, donde hay 3.000km, con diez
veces más de recorrido.
La realidad es que los grandes
integradores, Fedex, UPS y DHL que sí que es europeo, se han beneficiado
y se benefician del crecimiento del comercio internacional, tanto
intraeuropeo como extraeuropeo, y los mucho mejores márgenes de la
paquetería internacional. La compra de TNT por parte de Fedex no lo va a
mejorar en absoluto.
TNT, en manos del correo holandés y
que curiosamente provenía de una multinacional australiana, había
logrado instalar una marca en Europa y en algunos países más de la UE y
del mundo, una oferta de paquetería low cost basada en una red terrestre adaptada a las distancias en Europa, sobre todo en la almendra central de países más grandes.
Que
ahora para mandar algo de España a Francia o de Bélgica a Alemania se
tenga que utilizar un integrador como Fedex, DHL o UPS, expresa bien a
las claras lo mucho que deja de desear la integración del transporte y
la logística en la UE.
Los cargadores vamos a tener menos oferta y a la larga esta será más cara. Se comprende la alegría de Fedex, porque cree que la UE no se opondrá esta vez a su oferta. Pero la realidad es que esto no es una buena noticia para los clientes.
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