Los turistas extranjeros no
han dejado de llegar a España durante la crisis, mientras los españoles
sí se quedaban en casa. Pero esta Semana Santa también los autóctonos
han hecho las maletas. Un largo puente del Primero de Mayo está también
ahora a la vuelta de la esquina. Pero, ¿pueden ya los españoles
permitirse ir otra vez de vacaciones?
Aspecto de una playa española la pasada Semana Santa.
Los resultados positivos registrados por el turismo durante las vacaciones de Semana Santa han abierto las esperanzas de recuperación del mercado nacional.
Se ha producido claramente un punto de inflexión después de varios
años de crisis económica caracterizados por una fuerte contracción del
consumo de los españoles.
Los viajeros nacionales han sido los principales artífices de los buenos datos de la Semana Santa, período en el que la ocupación turística se ha situado en el 75,7 %, siete puntos porcentuales por encima del mismo periodo de 2013, teniendo en cuenta que esta semana de vacaciones no se celebra en muchos países de nuestro entorno. En comunidades como Canarias se ha superado el 95%. Mientras, que en Andalucía y Levante se han logrado los mejores resultados desde 2007.
Uno de los destinos estrella ha sido la Comunidad Valenciana, con un 80% de ocupación media, y con un turismo nacional que se puede decir que ha gastado más. En Andalucía se han ocupado dos de cada tres habitaciones, un 5% más que el pasado año y tan solo en Málaga capital, la Semana Santa ha traído 30 millones de euros.
Un buen termómetro para calibrar la reactivación del turismo durante las últimas vacaciones se ha dejado notar por ejemplo en los aeropuertos, donde hubo un continuo trasiego de viajeros. El del Prat en Barcelona registró, solo durante el pasado Lunes de Pascua, más vuelos y pasajeros que en toda la Semana Santa. En los aeropuertos de AENA, se produjeron 8 millones de desplazamientos, un 15% más que el año pasado.
En el norte del país, el buen tiempo ha sido clave para que Galicia haya incrementado su ocupación hasta un 15% sobre la de 2013, con un aumento considerable del número de peregrinos en el Camino de Santiago.
Los hoteles se llenaron al 76%, frente al 71% de 2013. Y en cuanto a las casas rurales, un tipo de alojamiento donde es más frecuente que acudan españoles que visitantes internacionales, registraron una ocupación del 89%, respecto al 57% del ejercicio anterior. Las de este año son las mejores cifras de ocupación desde 2011.
Tampoco hay que pasar por alto, aseguran los expertos, que la situación financiera de las familias españolas mejoró notablemente el año pasado. La diferencia entre los ahorros y las deudas de los hogares alcanzó a finales de 2013 los 1,044 billones de euros, el nivel que había en 2006, justo antes de comenzar la crisis, según datos del Banco de España. Supone un aumento de un 25,6% en relación con el ejercicio anterior.
Esta recuperación de la riqueza financiera de los hogares se explica tanto por la reducción de las deudas, fruto de la caída en la contratación de nuevos créditos y la devolución de los vigentes, como por el aumento del ahorro, motivado por la incertidumbre con la que todavía se miraba el futuro durante el año pasado.
Hasta aquí los datos que están poniendo en valor tras la Semana Santa todos los sectores afectados por el turismo en España. El Confidencial Digital se ha puesto en contacto con varios representantes del sector turístico para conocer si consideran que los españoles tienen ya mayor capacidad de gasto y pueden, por tanto, destinar parte de sus ahorros a vacaciones, después de seis largos años de crisis económica y contención del consumo.
Desde el ministerio de Industria destacan que los resultados del primer trimestre de este año, con más de 10 millones de turistas extranjeros llegados a España, superan ya las cifras registradas en el mismo periodo de 2013, incluso sin el efecto de la Semana Santa, que ha tenido lugar en abril. “De cada 100 euros, 10 proceden de este sector”, revelan.
Resaltan que la recuperación de los niveles de renta disponible de los españoles en los últimos cinco meses ha propiciado una dinamización del consumo, lo que supone “otra señal más de recuperación en España”, algo que ya se está reflejando también en el turismo nacional, que representa el 50% de la actividad turística del país.
Por su parte, el presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), Juan Molas, lo tiene claro: “Los españoles no solo se pueden ir ya de vacaciones, sino que además cuando las ventas de la Semana Santa son elocuentes anticipa que la previsión para la temporada veraniega será una continuación a la tendencia mostrada durante estos días de descanso en plena primavera”.
Asegura que después de varios años de debilidad en el mercado turístico español, hay datos que permitan hablar ya, con moderado optimismo, de un cambio de tendencia para el próximo verano en lo que respecta al viajero nacional. Sin embargo, advierte que hasta finales de mayo o principios de junio no se podrá apreciar con detalle esta mejora.
Mientras, desde Exceltur, su vicepresidente ejecutivo José Luis Zoreda, explica que “las previsiones del conjunto de empresas turísticas para la Semana Santa ya apuntaban a una moderada recuperación del consumo turístico de los españoles y el continuado tirón de la demanda externa”.
El 56% de empresas turísticas esperaban en esas vacaciones una subida moderada de sus ventas respecto a las de 2013, y una mejoría de sus resultados en el 44,5% de las mismas, acorde con las positivas expectativas para el conjunto del segundo trimestre.
Revela también otro dato interesante de cara al turismo en España en los próximos meses. “La notable revisión al alza del consumo de los españoles y de los británicos desde el mes de enero, hace también revisar al alza la estimación del crecimiento del PIB turístico para el conjunto de 2014, desde el 1,8% previsto hace unos meses al 2%”.
No obstante, vaticina por otro lado una desaceleración paulatina del crecimiento de la actividad turística a medida que avance la temporada por la suavización del tirón de la demanda extranjera asociada a los conflictos de Egipto ocurridos en el verano de 2013 y el menor empuje de la demanda rusa.
Los viajeros nacionales han sido los principales artífices de los buenos datos de la Semana Santa, período en el que la ocupación turística se ha situado en el 75,7 %, siete puntos porcentuales por encima del mismo periodo de 2013, teniendo en cuenta que esta semana de vacaciones no se celebra en muchos países de nuestro entorno. En comunidades como Canarias se ha superado el 95%. Mientras, que en Andalucía y Levante se han logrado los mejores resultados desde 2007.
Uno de los destinos estrella ha sido la Comunidad Valenciana, con un 80% de ocupación media, y con un turismo nacional que se puede decir que ha gastado más. En Andalucía se han ocupado dos de cada tres habitaciones, un 5% más que el pasado año y tan solo en Málaga capital, la Semana Santa ha traído 30 millones de euros.
Un buen termómetro para calibrar la reactivación del turismo durante las últimas vacaciones se ha dejado notar por ejemplo en los aeropuertos, donde hubo un continuo trasiego de viajeros. El del Prat en Barcelona registró, solo durante el pasado Lunes de Pascua, más vuelos y pasajeros que en toda la Semana Santa. En los aeropuertos de AENA, se produjeron 8 millones de desplazamientos, un 15% más que el año pasado.
En el norte del país, el buen tiempo ha sido clave para que Galicia haya incrementado su ocupación hasta un 15% sobre la de 2013, con un aumento considerable del número de peregrinos en el Camino de Santiago.
Los hoteles se llenaron al 76%, frente al 71% de 2013. Y en cuanto a las casas rurales, un tipo de alojamiento donde es más frecuente que acudan españoles que visitantes internacionales, registraron una ocupación del 89%, respecto al 57% del ejercicio anterior. Las de este año son las mejores cifras de ocupación desde 2011.
Tampoco hay que pasar por alto, aseguran los expertos, que la situación financiera de las familias españolas mejoró notablemente el año pasado. La diferencia entre los ahorros y las deudas de los hogares alcanzó a finales de 2013 los 1,044 billones de euros, el nivel que había en 2006, justo antes de comenzar la crisis, según datos del Banco de España. Supone un aumento de un 25,6% en relación con el ejercicio anterior.
Esta recuperación de la riqueza financiera de los hogares se explica tanto por la reducción de las deudas, fruto de la caída en la contratación de nuevos créditos y la devolución de los vigentes, como por el aumento del ahorro, motivado por la incertidumbre con la que todavía se miraba el futuro durante el año pasado.
Hasta aquí los datos que están poniendo en valor tras la Semana Santa todos los sectores afectados por el turismo en España. El Confidencial Digital se ha puesto en contacto con varios representantes del sector turístico para conocer si consideran que los españoles tienen ya mayor capacidad de gasto y pueden, por tanto, destinar parte de sus ahorros a vacaciones, después de seis largos años de crisis económica y contención del consumo.
Desde el ministerio de Industria destacan que los resultados del primer trimestre de este año, con más de 10 millones de turistas extranjeros llegados a España, superan ya las cifras registradas en el mismo periodo de 2013, incluso sin el efecto de la Semana Santa, que ha tenido lugar en abril. “De cada 100 euros, 10 proceden de este sector”, revelan.
Resaltan que la recuperación de los niveles de renta disponible de los españoles en los últimos cinco meses ha propiciado una dinamización del consumo, lo que supone “otra señal más de recuperación en España”, algo que ya se está reflejando también en el turismo nacional, que representa el 50% de la actividad turística del país.
Por su parte, el presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), Juan Molas, lo tiene claro: “Los españoles no solo se pueden ir ya de vacaciones, sino que además cuando las ventas de la Semana Santa son elocuentes anticipa que la previsión para la temporada veraniega será una continuación a la tendencia mostrada durante estos días de descanso en plena primavera”.
Asegura que después de varios años de debilidad en el mercado turístico español, hay datos que permitan hablar ya, con moderado optimismo, de un cambio de tendencia para el próximo verano en lo que respecta al viajero nacional. Sin embargo, advierte que hasta finales de mayo o principios de junio no se podrá apreciar con detalle esta mejora.
Mientras, desde Exceltur, su vicepresidente ejecutivo José Luis Zoreda, explica que “las previsiones del conjunto de empresas turísticas para la Semana Santa ya apuntaban a una moderada recuperación del consumo turístico de los españoles y el continuado tirón de la demanda externa”.
El 56% de empresas turísticas esperaban en esas vacaciones una subida moderada de sus ventas respecto a las de 2013, y una mejoría de sus resultados en el 44,5% de las mismas, acorde con las positivas expectativas para el conjunto del segundo trimestre.
Revela también otro dato interesante de cara al turismo en España en los próximos meses. “La notable revisión al alza del consumo de los españoles y de los británicos desde el mes de enero, hace también revisar al alza la estimación del crecimiento del PIB turístico para el conjunto de 2014, desde el 1,8% previsto hace unos meses al 2%”.
No obstante, vaticina por otro lado una desaceleración paulatina del crecimiento de la actividad turística a medida que avance la temporada por la suavización del tirón de la demanda extranjera asociada a los conflictos de Egipto ocurridos en el verano de 2013 y el menor empuje de la demanda rusa.
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