Para Stephen M.R. Covey, la confianza en tus empleados es un valor que se traduce en dinero y en el éxito de un negocio, pero... debe comenzar con el líder.
La confianza se construye y es responsabilidad de los líderes.
POR: Tatiana Gutiérrez
El autor del libro “La velocidad de la confianza; el valor que lo cambia todo” y reconocido por ser fundador y presidente ejecutivo de CoveyLink Worldwide, afirmó en entrevista con AltoNivel.com.mx que no sabía la importancia de esta palabra en el mundo empresarial hasta que se vio sumergido en la desconfianza.
“Empezamos desde abajo, estábamos en una empresa que carecía de credibilidad. Cuando una empresa carece de confianza, no sólo perjudica a cada uno de sus componentes, también se refleja en la percepción externa. La carencia de confianza tiene un costo, y es financiero. Aquí es donde me di cuenta que la confianza depende de sus líderes y de su comportamiento. Debemos estar conscientes de que la primera obligación de un gran líder es ‘inspirar confianza’”, asegura Covey.
Pero, ¿cómo perjudica la confianza en los negocios? El también autor de “Los siete hábitos de la gente altamente efectiva” y papá de Stephen M.R. Covey escribe en el prólogo del libro “La Velocidad de la Confianza” que “Cuando hay poca confianza se generan fricciones, ya sea por conductas poco éticas o por conductas éticas pero incompetentes. Cuando hay poca confianza se paga un precio muy alto en la vida y en las organizaciones, crea tensiones ocultas, intrigas, conflictos personales, rivalidades entre departamentos, pensamiento ganar/perder, comunicación defensiva y protectora: circunstancias que reducen la velocidad de la confianza. La escasa confianza lo ralentiza todo: todas las decisiones, todas las comunicaciones y todas las relaciones.”
Para M.R. Covey, existen muchos mito alrededor de la confianza que puede llegar a demeritar su valor en las empresas:
Mito #1. Es un concepto “soft”
“La realidad es que la confianza es social y financiera”, asegura Covey. La confianza genera la reducción de costo, aumenta la energía de los colaboradores y los clientes, aumenta la productividad y crea empresas abiertas, plenas y divertidas.Mito #2. Es de lenta adquisición
Se basa en la credibilidad propia y en el comportamiento que se proyecta, en pocas palabras es una cuestión de actitud. Si bien es cierto que cuesta tiempo, cuando la confianza es un modo de vida, no sólo es de fácil adquisición, sino sencilla de mantenerse.Mito #3. Es absoluta, existe o no
“Yo digo que ahí se empieza. No quiere decir que sea absoluta e intangible, esta puede empezar desde abajo o con toda velocidad, lo importante es fortalecerla y alimentarla siempre, se trata de ser constantes”.Crear confianza, la tarea de los líderes
De acuerdo con Covey, la confianza comienza de las empresas comienza por sus líderes y se compone de dos factores importantes:• Credibilidad personal. Se necesita carácter y competencia personal.
• Inspirar confianza. La mejor manera de hacerlo es entregándola primero. “Cuando yo le tengo confianza a alguien, siempre van a confiar de regreso, hay que aprender a entregarla”.
Para que esto funcione, existen elementos que conforman la confianza y que tú y tu equipo deben de preocuparse por implementar. ¡Pon atención!
1. Transparencia
Un líder debe ser transparente con su gente, lo dice M.R. Covey, quien convirtió a Covey Leadership Center en la mayor empresa de desarrollo de liderazgo del mundo. “Si no comunicas cuál es tu intención desde un inicio, las personas comienzan a adivinar y ponen palabras en tu boca, hacen lo creen y no llegan a los objetivos de la empresa, esta es la importancia de ser transparentes”.2. Practica la confianza
Es importante tomar esta responsabilidad, los líderes exitosos confían en su gente, la reconocen y saben cuáles son sus errores. “Es la regla del espejo, como decía Jim Collins: cuando las cosas están bien, el gran líder se asoma por la ventana y ve a su gente y le da el crédito; cuando las cosas están mal, el líder se ve en el espejo y acepa sus responsabilidades”.3. Escucha primero
¿Cuántas veces no has escuchado este consejo? Escuchar a tu gente y a tus clientes es necesario para generar confianza en el prójimo, el autor recomienda nos sólo escuchar, sino entender: cumplir con sus compromisos y dar respuestas.Pero ¡Cuidado! Este valor se puede perder muy fácilmente cuando se rompen las promesas y los compromisos, es por ello que la recomendación es ser cuidadosos en hacerlos, hay que ser selectivos y honestos.