Como la mayor parte de las empresas multinacionales exitosas y en crecimiento lo confirmarán, los costos del flete beneficiarán o afectarán el balance final. Tomarse tiempo suficiente para perfilar las rutas de transporte con el fin de determinar la eficacia de la logística y establecer las mejores prácticas a nivel empresarial permitirá ahorrar dinero en fletes, reducir los tiempos del transporte, aumentar los márgenes de ganancia y alcanzar una plena satisfacción del cliente. Los consejos a continuación lo guiarán en la dirección correcta:
Escoja un modo de transporte óptimo
Las empresas y los bienes no se
construyen de la misma forma; lo mismo sucede con las mejores prácticas
de flete marítimo. Simplemente porque una organización muy exitosa
utiliza un método de transporte específico para el envío de sus productos a nivel nacional e internacional,
esto no significa que dichas metodologías se traduzcan en un éxito para
su empresa. Por ejemplo, muchas empresas ofrecen el envío al día
siguiente; sin embargo, esta práctica no es físicamente posible o real
para otras empresas. La siguiente es una regla de oro para cada modo de
transporte:
Transporte terrestre
El transporte con camiones suele ser una
opción ideal para los envíos nacionales e intermodales, o sea, aquellos
que utilizan dos o más formas de transporte para completar un envío, y
para los fletes internacionales que transportan una carga de gran tamaño
o gran cantidad. Dichos envíos pueden incluir, por ejemplo, maquinaria
grande, productos secos a granel, artículos perecederos y mucho más. Los
camiones suelen ser necesarios para trasladar productos hacia un puerto
de una manera rentable. Además, en general son la opción local más
rentable para transportar productos que tienen un horario previsto y
pocas posibilidades de retraso, pero que no se consideran una
emergencia.
Transporte marítimo
Los buques de alta mar
se utilizan predominantemente para grandes envíos internacionales cuyo
plazo no es demasiado crucial. Los envíos se pueden empacar de forma
prolija en contenedores de distintos tamaños o simplemente remolcar
sobre el buque si el producto es demasiado grande para guardarse en los
contenedores estándar. El peso suele ser irrelevante. Si piensa
transportar una cantidad significativamente grande de un producto
liviano, como ser juguetes de felpa, probablemente sea menos costoso
transportarlos por vía marítima en lugar de por vía aérea.
Transporte aéreo
Los envíos por avión
se utilizan en general para los casos de emergencia, en cantidades
pequeñas y livianas, y la mercancía requiere de mayor garantía. Los
envíos por avión suelen ser más costosos; sin embargo, en ocasiones,
podría descubrir que invertir un adicional de USD 2500 en pasaje aéreo
le ahorrará millones en satisfacción del cliente en situaciones de
urgencia.
Transporte ferroviario
Los envíos por tren
con frecuencia resulta el mejor medio para transportar grandes cargas
con una importante flexibilidad en el horario de entrega. Puede utilizar
envíos por tren que sean costeables como parte de su plan de logística
intermodal y así ahorrar dinero si tiene tiempo suficiente. Esta
metodología se utiliza con poca frecuencia, dado que la mayoría de las
empresas tienen que transportar la mercancía en camiones hasta la
estación ferroviaria. Sin embargo, si su envío debe viajar una distancia
larga, ya sea hasta un puerto o un usuario final local, suele ser
bastante menos costoso que utilizar solo camiones para el envío
completo. Si debe trasladar el envío a una distancia relativamente
corta, usar un camión probablemente termine resultándole un ahorro de
dinero.
La primera forma de ahorrar una cantidad
significativa de dinero es conocer bien sus productos y determinar los
mejores métodos de transporte que se pueden usar para los envíos y
cuándo debería usarlos. Una vez que posea un curso de acción principal y
uno secundario sólidos, podrá mirar hacia nuevas rutas para recortar
costos.